La pintura del cochabambino Gíldaro Antezana

No cabe duda que entre los nombres más notables de la Pintura Boliviana del Siglo XX está el del cochabambino Gíldaro Antezana. Este artista oriundo de Ayopaya, Cochabamba ha adquirido mayor protagonismo estos últimos años. No por nada una de las Salas de Exposición de Arte de la ciudad lleva su nombre.

Primeros años en los Valles de Cochabamba

Un 8 de junio de 1939 nacía en Chinchiri (Provincia Ayopaya, Departamento de Cochabamba) Gíldaro Antezana Rojas. Cuenta la historia que a muy temprana edad el pequeño Gíldaro se trasladó a la Ciudad de Cochabamba en busca de mejores oportunidades. También se dice que cuando rondaba los 20 años dejó su trabajo de talabartero porque descubrió su pasión y talento por la pintura.

Inmediatamente Antezana entró a la Escuela de Bellas Artes de Cochabamba donde empezó a dar sus primeros pasos en el arte. Egresó de este centro de formación artístico en 1954 y de a poco fue adquiriendo un espacio dentro de las artes plásticas del país. Su primera exposición personal fue en 1961 y en 1966 ganó el Primer Premio Nacional de Pintura Salón Murillo en la Ciudad de La Paz con su obra “Cancha de Gallos”. A partir de ahí, su reconocimiento creció y llegó a realizar exposiciones en países como Ecuador, Brasil, España, Francia, Estados Unidos y Yugoslavia.

Peleas de gallos y los miloficios de Gíldaro

Algo que se destaca de la personalidad y la vida de Gíldaro Antezana era su habilidad para realizar un sinfín de trabajos manuales. Por eso es que su fama de miloficios llegó a ser retratada también en su pintura. Un claro ejemplo de esto son las diferentes pinturas que tiene de peleas de gallos.

Gíldaro era un apasionado de esta actividad y de estas aves. De hecho, este se dedicaba a la crianza de gallos en Cochabamba. Sus pinturas de este tipo vienen de esta otra afición del pintor y dentro de su uso de la pintura y el movimiento que transmiten encontramos una violencia y fugacidad en el pincel increíbles. También algunos estudiosos de la obra de Antezana han resaltado la crudeza de estas composiciones y de otras acercándose al arte de Goya.

La personalidad de Cayetano: el otro Gíldaro

Otro grupo de pinturas que resaltan en la obra de Gíldaro Antezana es el que tiene como parte del cuadro a un personaje que es llamado Cayetano. Está confirmado por el mismo pintor que Cayetano es una forma de representarse a él mismo en los cuadros que pintaba. Muchas de las obras llevan el mismo nombre de Cayetano en el título y otras solo sugieren una aparición secundaria.

En ambos casos, la presencia de este alter ego tiene referencias con un personaje de El Quijote, aspecto que ha llevado a relacionar la obra de Antezana con la del paceño Solón Romero. Sea válido esto o no, la presencia de Cayetano en la obra de Gíldaro no hace más que potenciar el arte de este talentoso pintor.

Si quieres conocer más de la obra de Gíldaro Antezana y de otros pintores bolivianos puedes decidirte por tomar un Taller de pintura. En ciudades como Cochabamba existen centros culturales de arte que te enseñan a pintar mientras conoces más de las Artes Plásticas Bolivianas.